miércoles, 30 de enero de 2008

Nuestra pasión...

Se acabó mi principal pasatiempo y tengo que felicitar en consecuencia a los aficionados y fanáticos de los Tigres de Aragua, bien merecido el título (tengo que decirlo).

Es nuestro béisbol, el venezolano, una temporada muy particular que va de Octubre a Enero que puede compararse con la temporada de las grandes ligas en Estados Unidos, con la liga española, con el calcio italiano, con la temporada de fútbol argentino o brasilero y en fin con temporadas de deporte de principal identificación nacional. Soy fanático del béisbol y como bien pueden deducir aficionado al equipo de mi tierra, al Cardenales de LARA.

Son ocho equipos en total los que participan, donde no cabe la menor duda que aquellos que recogen una gran cantidad de seguidores son los representantes de dos de las principales ciudades del país: Caracas y Valencia en la figura de los Leones y los Navegantes del Magallanes, equipos que por cierto para esta temporada estuvieron dentro de los tres primeros equipos eliminados, el otro fue las Águilas del Zulia, es entonces cuando empiezan a escucharse cualquier cantidad de excusas, unos alegan que los “empavaron” con una supuesta estrategia de mercadeo que intentó cambiarle el color a un uniforme reconocido y, hasta hace poco, respetado por su amplia trayectoria y por la gran cantidad de lauros alcanzados; y otros alegan que sus reconocidas figuras debieron apartarse para cuidar y sanar bien algunas lesiones. Así, la gran fanaticada venezolana empieza a enumerar no sólo las excusas sino los ajustes que debe hacer cada gerencia para lograr escalar un mejor puesto en la próxima temporada.

Luego de la ronda eliminatoria y con el calor del abrazo de fin de año, comienza una segunda ronda (aún llamada con el idioma del imperio “round robin”), donde sólo los dos primeros lugares pasan a disputar el campeonato en una serie final de 7 juegos para ganar 4. Así pues, en la liga celestial (tal como se le suele llamar al espacio que ocupan los equipos que se van descartando) se unen tres equipos más para que en la última semana de Enero se defina quién es el mejor.

Quiero referirme a los primeros cinco equipos en su orden de llegada, cada uno tiene su mérito. Los Tigres de Aragua, es un equipo que definitivamente debe definirse como el equipo del nuevo milenio pues ha ganado 4 títulos en las últimas 6 series finales, un equipo con figuras muy bien establecidas en el béisbol de grandes ligas así como con figuras emergentes y otras de importante experiencia en nuestra pelota. Los Cardenales de LARA quienes para sorpresa de muchos llegaron lejos de la mano de un muy cuestionado e inexperto manager. Los Tiburones de La Guaira, equipo que cuenta con la afición más alegre y entretenida por su “samba” característica que entusiasma a todo un estadio, y que en esta oportunidad alcanzaron un inmejorable tercer puesto teniendo en cuenta que su nómina no reunía la cantidad de figuras reconocidas de otros equipos y la inestabilidad por cambios en la dirección. Los Caribes de Anzoátegui quienes se mantuvieron en la punta por toda la ronda eliminatoria, principales favoritos para ir a la final, pero así es la pelota, redonda y viene en caja cuadrada. Y finalmente los Bravos de Margarita, a mi juicio un buen papel con el quinto lugar para una franquicia que experimenta una nueva localidad y un reacomodo de la nómina de jugadores.

Así las cosas, puede entenderse que el béisbol es parte importantísima de nuestra cultura deportiva, tanto, que a la hora que terminé de escribir este post (ayer 11:53 pm) no dejaba de sonar mi teléfono por la cantidad de mensajes que envían muchos amigos para bromear sobre la eliminación del equipo al que le profeso una lealtad especial.

Luego de tanta batalla deportiva cada quien con la gorra que nos identifica, terminamos ligando el mejor de los éxitos en un mismo equipo que pasa a representar a Venezuela en una Serie del Caribe que tiene este año la triste noticia de la ausencia de Puerto Rico por la falta de interés del público, así entonces: suerte y éxito a los Tigres de Aragua… ahora, de Venezuela…!!!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo no soy aficionada al beisbol, pero reconozco que ver un juego de pelota en vivo es emocionante independientemente de que no tengo idea de quiénes son los jugadores y mucho menos las reglas..hace poco fui a un encuentro de beisbol con amigos y lo disfruté, incluso como un juego del Madrid vs Barza pero sin tensión (jejeje)... Al igual que he disfrutado juegos de baloncesto donde no voy por alguien en particular, pero al ver a esa maravillosa multitud, amigos que se nota que sufren el encuentro cuando su equipo va perdiendo, pues terminas contagiándote de la pasión de otros..
Creo que el deporte en general es así, apasionante y te llena de mucha emoción; se pretende conocer quien es el mejor, es la lucha individual o grupal por una copa, una medalla, un lugar que llena de orgullo a jugadores, familiares, amigos y por supuesto a los seguidores..

Saludos

Anónimo dijo...

En Venezuela hay muchas cosas buenas -ni hablar de las bellas-pero hablemos de las buena y sin duda es su GENTE… y esta gente dentro de sus gusto tiene el béisbol, me atrevo a decir que hay dos estaciones en este hermoso país y es antes y después del béisbol, es más lo que la política intenta dañar lo une este deporte, he tenido la fortuna de disfrutar estos juegos con amigos y familiares, todos y cada uno apoyando a equipos distintos, es súper divertido, tanto así que en oportunidades no hace falta que el equipo de tu preferencia este jugando, lo que prevalece es el deseo de compartir

Soy fanática de Los Tiburones de la Guaira… pero al final cuando todo esta dicho voy a VENEZUELA (para mi el mejor de los equipos)