miércoles, 13 de febrero de 2008

Las caras de Cupido...

Quiero introducir el tema de refiriéndome a uno de esos encuentros para solteros que no son nada fortuitos. Les voy a echar un cuento cercano de un fulano que conozco muy bien, así que presten atención: un buen amigo “X” proyectándose en lo “difícil y preocupante” que se supone debe ser vivir en soledad, o sin “pareja estable”, quiso presentarle a mi gran amigo “J” como buen candidato para una “relación seria” a una linda colega de su, entonces, novia, hoy esposa. La candidata es una mujer profesional, exitosa, dedicada, humilde, pero (siempre hay un pero) iniciando un proceso de separación o divorcio. Para hacerles el cuento corto, el “asuntico” no funcionó, las sombras de un pasado muy reciente en algunos puntos coincidentes del amigo “J” fueron suficientes para que el esfuerzo de Cupido, encarnado en aquel amigo “X”, no resultara satisfactorio, todo sucedió en cuestión de semanas.

Ahí aprendí (por experiencia ajena, claro está…!) que existen, entre los diversos factores de evaluación para una relación, dos aspectos fundamentales. Uno va relacionado con el alcance de la madurez para cerrar los ciclos pasados, es decir, haber pasado el guayabo o despecho, cosa que en cada persona sucede de manera distinta y con tiempos distintos y de ahí se desprenden eternas borracheras, llantos inconsolables, viajes al exterior, shoping en Miami, asuntos que pueden durar días, semanas, meses o años. Lo otro que evidencié es la fragilidad de los encuentros que si bien no son forzados, pues nadie apunta con un revólver, de alguna manera opera la preparación del ambiente, el teatro, donde lo natural es fingido e inclusive actuado y de ahí que las bases de cualquier relación que surja podrá caer así goce de la más benévola intención.

Así como el caso anterior también existen otros “cupidos”, gente de buena intención que busca la unión de personas, es el siguiente Cupido un personaje reconocido en la Gran Manzana:

Cupido no sólo encarna en buenos amigos, también puede ser un espacio en Internet pues hay varias webs diseñadas para el encuentro, también programas radiales y de TV, prensa escrita o en organizadores de eventos para solteros (cruceros, fiestas, bingos, etc); pero en Nueva York está al volante de un taxi, es calvo, con bigotes y un indudable rostro del medio oriente.

Ahmed Ibrahim es un inmigrante egipcio de 53 años y organiza citas a ciegas para sus pasajeros solteros por medio de un servicio casamentero improvisado y gratuito que opera desde su taxi. Dice que encuentra parejas, o cuando menos les organiza una cita, a unas ocho personas por semana. Es denominado el Matchmaker Cabbie.

"Nueva York es una ciudad muy difícil para las citas amorosas", (lo que no sabe el egipcio es que Caracas también…)"En este taxi he escuchado mucho llanto y muchos pleitos, y he visto muchos corazones rotos". "Hubo ocasiones en que personas excelentes no se encontraron por cuestión de minutos; una entraba a mi taxi justo después que otra se había bajado de él", dijo.

Lo curioso es que su sistema parece funcionar (y mejor que los “asunticos” de aquel otro Cupido): Natalie Dillon, en abril del 2004 se subió al taxi de Ibrahim acompañada de algunas amigas para ir a una fiesta. Cuando empezaron a comentar sobre lo difícil que era encontrar a un tipo decente, Ibrahim hizo un momento de publicidad a través del vidrio antibalas: "Hey, señoritas, yo formo parejas". Dillon le describió lo que ella buscaba en un hombre, y le dio a Ibrahim el número de su teléfono celular, seis semanas después él la llamó y le dijo: "Natalie, tengo un tipo para ti". Luego de unas semanas se citaron para conocerse, y seis meses después los “encontrados” siguen juntos (¿ven que sí funciona?).

Interpretar el papel de "celestino" con una licencia de taxista es algo que le cae naturalmente, aunque dio con el papel por accidente. Ha aparecido en Fox News, en la ABC y en el Wall Street Journal. Incluso tiene un agente que ofrece su historia a productores de Hollywood (mientras que el amigo “X” está asignado en Nigeria…).

Ibrahim no cobra por sus servicios; lo hace por diversión, dijo. Pero no ofrece su ayuda a cualquiera que suba a su taxi (hay que señalar que el amigo “X” tampoco cobró un centavo... y si lo hubiese hecho tenía que devolverlo…). Sin embargo por mucho que se esfuerce, su trabajo lidia con algo tan complejo como el amor y el atractivo entre las personas, por lo que no todas las parejas que ha concertado han tenido éxito.

Pero también está el Cupido en trámite, y no es otro sino aquel que sin armar teatros logra servir de enlace para uniones que luego dan sana envidia por lo natural como fluye todo, es decir, el que hace el trabajo de Ibrahim pero sin saberlo pues ni se lo propone. Esos tienen sus méritos…!!!

En fin, que cada quien asuma su responsabilidad si el final feliz justifica los medios, y para quien esté gozando de esa felicidad en esa relación y se sienta enamorado o enamorada pues el 14 de febrero es un excelente día para celebrarlo y renovarlo con su pareja…!!!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo he tenido la suerte de contar con varios tipos de Cupido. Amigos casi siempre, de esos que tu mencionas que te quieren buscar un novio porque SI y punto y también ese que tu llamas Cupido en trámite. Alguna vez resultó, no voy a decir que no, pero al final son muchos factores los causantes de que esas ganas locas de nuestros cupidos se cumplan o no.

Siempre tuve mis reservas y muchas con respecto al ¨Cupido Internet¨. Ahora no se si por una experiencia muy cercana, específicamente mi hermana, pues cambié de opinión. A ella le resultó positiva, tanto así que hoy día está felizmente casada y con 2 niños, vive en México y conoció a mi cuñado por un chat de amigos en internet. Este ¨Cupido¨ me sigue pareciendo arriesgado pero a veces conocemos a alguien en persona, comenzamos a salir y luego te das cuenta que no era lo que estabas buscando. Lo que si creo es que por este medio, al menos a mi, se nos hace mas fácil expresarnos. Fíjate si no, lo ¨valiente¨ que soy al expresarme como lo hago de ti, sin conocerte personalmete, sino en fotos y por lo que plasmas en tus posts. Quizás no sería capaz de hacerlo cara a cara.

Quien sabe Juan Carlos, quizás algún día aparezca ese ¨cupido¨ entre nosotros... Mientras tanto soy feliz cuando te leo y escribo.

Feliz día de San Valentín JC...

Anónimo dijo...

Yo tengo una amiga que se la pasa en eso, me parece, por lo constante de su actitud; que es su segundo trabajo..sólo que no cobra por ello..Pero bueh, dejando el chistecito!! no creo mucho en el cupido que se manifista a través de los amigos. Es mejor, cuando cupido aparece solito y directamente, así, sin buscarlo, sin necesidad de intermediarios. Si se llega a dar el enamoramiento entre las personas flechadas es porque ambos lo decidieron, seguramente se encontraban en el momento oportuno y con las mismas necesidades, sea presencial o por internet. A decir verdad, creo que cuando se menciona a cupido, se está hablando de Dios; porque seguramente fue él quien lo puso en el lugar y la estación perfecta.

Saludos

Anónimo dijo...

ES MUY GRACIOSO HASTA EL NOMBRE - CUPIDO -. CREO QUE TODOS, EN ALGÚN MOMENTO, HEMOS TENIDO O HASTA HEMOS QUERIDO SER ESE CUPIDO. GENERALMENTE CUANDO TERMINAMOS UNA RELACIÓN APARECEN ESAS AMIGAS CUPIDOS QUE QUIEREN PRESENTARNOS A TAL O CUAL CANDIDATO. LO HACEN, O HACEMOS, CON LA MEJOR INTENCIÓN Y EL MAYOR CARIÑO, SIN EMBARGO, ESTOY DE ACUERDO EN QUE EL MEJOR CUPIDO ES EL QUE TU LLAMAS ¨CUPIDO EN TRÁMITE¨ YA QUE SE CONVIERTE EN EL PRIMER ENLACE ENTRE ESAS DOS PERSONAS SIN PROPONÉRSELO.

EN ESE CASO, LOS ¨CUPIDOS EN TRÁNSITO ¨, UN CONOCIDO O AMIGO EN COMÚN O HASTA UN HERMANO, SUELEN SER LOS MEJORES CUPIDOS SIN NINGUNA INTENCIÓN DE SERLO Y LO QUE PASE A PARTIR DE ESE PRIMER ENCUENTRO YA DEPENDERÁ, EN PRINCIPIO, DE ESA PRIMERA IMPRESIÓN PARA QUE SE DE O NO UN SEGUNDO.

UN BESO,
PILAR